viernes, 25 de diciembre de 2015

Aprendiendo de la inclusión en actividades de tiempo libre

Much@s podrían pensar que un niño como M. no podría estar incluido en unas colonias de verano, haciendo actividades, y aguantando toda la jornada (7hrs/día); much@s justificarían la negativa diciendo que no participar es mejor para el niño, para que no se agote, para que no se frustre...
M. tiene Síndrome X-Frágil (SXF), una de las causas más común de discapacidad intelectual hereditaria. "Este síndrome puede causar déficit cognitivo que va desde sutiles dificultades en los aprendizajes, hasta un retraso mental que puede ir de moderado a grave. Aunque el retraso mental es el síntoma más característico, las manifestaciones del SXF son complejas" (Associació Catalana Síndrome X Fràgil).

L@s niñ@s con SXF suelen presentar un retraso general en el desarrollo, aunque las manifestaciones más evidentes están ligadas a la conducta: trastorno de la atención, hiperactividad, aleteo de las manos y comportamientos autistas; estos patrones se presentan más en niños que en niñas, en quienes esto es más leve; ellas presentan problemas de atención, de aprendizaje y gran timidez.

M. acude a una escuela pública ordinaria, por lo que tiene una socialización rica y goza de una educación bastante inclusiva, y eso se nota.

Es cierto que no todo es camino de rosas, que la jornada es larga, pero ¿no lo es también para cualquier otra criatura de 6 años?
Es cierto que M. no siempre querrá estar donde esté el grupo, o haciendo la misma actividad, pero ¿quiere decir esto que sea mejor que se quede en casa?

M. necesita mucha estructuración y anticipación en el día a día, necesita que le conozcas (para que sepas lo que le puede incomodar, o hacer sentir mal y, del mismo modo, lo que le puede estimular; para que sepas comunicarte con él) y conocerte (para tener confianza, para sentirse seguro). Pero, ¿acaso esto se aleja de lo que necesita cualquier niñ@ o cualquier persona? ¿Es eso un problema o es parte de la realidad humana?


Está claro que, más allá de esto, un niño como M. necesita una serie de atenciones específicas que otr@s niñ@s de su edad ya dejaron atrás, o quizás nunca necesitaron, pero M. es un niño y tiene (igual que el resto) derecho a estar en espacios con otr@s niñ@s, disfrutar de actividades en su tiempo libre, decidir que le gusta y que no le gusta, ser escuchado y, sobretodo, respetado. M. tiene derecho a ser un niño y a disfrutar de una infancia plena.

Para mí, el día a día con M. durante un mes fue agotador, gratificante, emocionante y extraordinario. Es maravilloso ver como pinta, va de excursión, come en grupo, se atreve a probar cosas nuevas, muestra una memoria increíble, es divertido y, si le das tiempo, si le prestas atención, M. te enseña que puede ser un participante activo.

Para los otros niños y niñas... es asombroso ver como conductas aparentemente "agresivas" que M. realiza con todo el amor del mundo, sus compañeras las aceptan como lo que son, signos de afecto.
También fue asombroso ver el cambio de comportamiento de un compañero más mayor, que al compartir tiempo con M. nos mostró su cara más sensible y responsable.

Aquello que necesita M. puede ser también un buen recurso para el resto. Si M. necesita calma y armonía para mantenerse tranquilo en la actividad, crear este clima contribuye a la armonía de todo el grupo y a desarrollar sensibilidad hacia las necesidades de las otras personas.

Para el resto de compañeras de equipo, implicadas en la inclusión de M. de manera activa, la experiencia supuso un proceso enriquecedor, de eso estoy segura.

Esto muestra el potencial de la educación inclusiva, los beneficios para l@s alumn@s "con necesidades educativas especiales", para el resto de alumn@s "especiales" (porque ¿quién no lo es?) y para l@s educador@s que aprenden y crecen con las particularidades de cada niñ@ y del conjunto del grupo.

 La educación inclusiva aporta riqueza para tod@s, aporta empatía, sensibilidad, aporta bienestar y es la manera más natural de vivir una educación para tod@s.

lunes, 30 de noviembre de 2015

"Poder o no poder hacer es un hecho político" Entrevista a Antonio Centeno

Antonio Centeno es activista social en el movimiento de vida independiente de las personas con diversidad funcional. Actualmente se encuentra realizando dos proyectos, el documental “Yes, we fuck” y la película de ficción realista “Vivir y otras ficciones”. Además, ejerció la docencia en la etapa de  secundaria durante 10 años.

Hablar con Antonio es enriquecerse. 
Cuando habla sabes que tiene las cosas muy claras, 
sus palabras contienen un gran espíritu luchador 
y transmiten deseos de libertad. 

Hace poco escribí una entrada sobre uso del lenguaje como herramienta para romper desigualdades. En este sentido, háblame sobre el significado del concepto “Diversidad Funcional” y su contraposición con el término “discapacidad”.

En primer lugar, usar el término Diversidad Funcional no es un intento de ser políticamente correcto, sino de ser político. No es una cuestión de desgracia personal, sino que es una cuestión política que interpela a toda la sociedad.

Todo el mundo es diferente, en muchos aspectos, también físicamente; hay diferentes maneras de funcionar, de hacer las cosas. Esto es más real que definir a alguien en base a sus capacidades, lo cual está contaminado por el utilitarismo y el productivismo, que no tiene en cuenta capacidades como la capacidad de querer  o de hacer reír a otra persona.

Las capacidades son el resultado de la interacción de la persona con el medio social, por lo que es más realista y más útil para definir la realidad asumir que hay diversas maneras de estar en el mundo, en lugar de intentar homogeneizar las formas de hacer, de funcionar. Las personas viven en comunidad y por eso poder o no poder hacer es un hecho político.

Los términos que se han venido utilizando (subnormal, minusválido, discapacitado…) provenían de una decisión tomada de arriba hacia abajo, de los profesionales hacia las personas. El nuevo término (diversidad funcional) surge de las propias personas que forman el colectivo, que sitúan el eje de las capacidades en una cuestión política y no personal. Las capacidades no son solo del individuo sino de toda la comunidad.

Todo el mundo es diferente, pero solo algunas maneras de ser hacen que sufras una discriminación sistematizada.

En contraposición al término con connotación negativa “discapacidad”, el término Diversidad Funcional se sitúa en un plano neutro, más bien positivo. Esta denominación es una abreviación del término  completo “Personas Discriminadas por sus Diferencias Funcionales”.

En relación con tu experiencia como docente en secundaria ¿cómo crees que se aborda la diversidad funcional en los institutos?¿Y en las escuelas?

Se aborda mal. Se aborda como un problema, no como riqueza o como un recurso. El problema de base se encuentra en la formación inicial y continua de los docentes y en los medios materiales, los espacios, las ratios (ya que para abordar bien la diversidad funcional hay que individualizar cada acto pedagógico).

A esto se le añade un enfoque negativo de la diversidad, en general, y la diversidad funcional es la que peor se aborda. Es la única que justifica una red paralela en la que se apartan alumnos y alumnas por su diferencia, si esto se hiciese por razón de sexo o de etnia, parecería horroroso, pero por características funcionales se considera lo mejor para el alumnado. Eso no pasa con otras diferencias personales.

Con este enfoque se acentúa la falta de formación y recursos. Además, la falta de apoyos sociales (por ejemplo, asistentes personales), empeora el abordaje. El Departament d’Educació, por ejemplo,  no permite entrar a las aulas a personas que no se hayan contratado desde el mismo. Pero es que los apoyos tienen que seguir a la persona, no la persona ir a donde están los apoyos.

Existe una entidad llamada Solcom, que lleva casos de discriminación en la escuela, en los que se quiere escolarizar a niños o niñas en centros de educación especial, en contra de la voluntad de la familia o los propios niñ@s.

Una red paralela que separa al alumnado del entorno, supone falta de relación con un grupo de iguales, una disminución de las relaciones, y es una de las primeras piedras para construir la discriminación. Además, esto no es solo un problema para l@s niñ@s con diversidad funcional, sino que los niños sin diversidad funcional pierden la oportunidad de aprender de las primeras y toman una visión de que estas son raras, personas a las que no hay que acercarse para no ser como ellas. Esto encamina hacia una visión fascista del mundo.

Además, les damos este enfoque, lo asumen y después pretendemos revertirlo con discursos y currículum, pero es más fuerte la violencia que han aprendido.

Si la formación docente, los recursos materiales y la organización escolar estuviesen enfocados a acoger a la diversidad, los docentes tendrían mejores herramientas para atender al conjunto del alumnado.

¿Crees que se están dando pasos firmes hacia la escuela inclusiva?

Una parte es firme. Existe cierto consenso científico, pedagógico y jurídico que apuesta por la escuela inclusiva, y este cada vez es más sólido. Pero el compromiso y consenso político no está nada consolidado, de hecho se están dando pasos hacia atrás desde la política general: se han quitado recursos, aumentado ratios y expulsado a alumnos hacia centros de educación especial.

Se ha reavivado una visión de las personas desde un punto de vista utilitarista y productivista. A nivel de política catalana y española las leyes son ambiguas y validan la doble red (educación especial – educación ordinaria). Es necesario un cambio legislativo de acuerdo con el citado consenso científico, pedagógico y jurídico.

El pedagogo canadiense, Gordon Porter instaba, en una entrevista concedida a El diari de l’Educació, a nuestro sistema educativo: “Coged los recursos de la escuela especial y ponedlos al servicio de la inclusión”. En este mismo sentido, en tu ponencia durante la I Jornada Bambú cia. de teatre, el pasado 18 de julio, hablaste de convertir los Centros de Educación Especial en centros de recursos para los profesionales de la educación. ¿Podrías hablarnos de esta idea?

Se debe hacer una planificación desde una perspectiva que dure más de lo que dura una legislatura, que no dependa del partido político de cada momento. La inclusión debe ser un hecho compartido. La inclusión pasa por hacer converger la red especial con la ordinaria. Los espacios físicos destinados actualmente a la “especial” deben ser espacios para maestr@s y profesor@s, no espacios para separar a niños y niñas.

El pasado 20 de noviembre fue la conmemoración de la Convención de los Derechos de la Infancia de 1989. El artículo 23 de esta convención se refiere a los derechos de l@s niñ@s “disminuid@s”. ¿Qué opinas de su formulación?

Se trata de un planteamiento un poco absurdo ya que lo que se establece como “derechos específicos” para este colectivo es para tod@s l@s niñ@s. Tendría sentido una mención específica si esta sirviese para dar herramientas específicas que materializasen los derechos comunes a tod@s. Resulta contraproducente establecer ciertos derechos especiales para gente especial, ya que genera guetos y valida la red paralela.

Se trata de una declaración de intereses superflua. No es perjudicial, más allá de la palabra (disminuid@s), pero no genera herramientas específicas.

La escuela inclusiva debe generar las mismas oportunidades para tod@s. Creando una diferenciación de manera inútil, lo único que se consigue es evidenciar que el grupo es diferente pero no se hace nada para garantizar los derechos.

Falta densidad de relato social para que cada cual pueda situarse donde mejor se sienta, si esto no existe, desde la escuela l@s niñ@s deben aprender que tienen derechos y a como ejercerlos, a cómo gestionar los recursos disponibles. Por ejemplo, cómo gestionar la disposición de un asistente personal es un proceso que debe comenzar desde la escuela.

¿Crees que las familias con hij@s con diversidad funcional reciben una adecuada información, orientación y apoyo?

La información que se da, hace responsables a los padres de la atención, y todo se centra en la autonomía física, no se habla de autodeterminación y autonomía moral. Aunque no conozco este tema con detalle.

¿Qué opinas sobre la sobreprotección por parte de las familias y la discriminación positiva que puedan ejercer, por ejemplo, en relación a herman@s sin diversidad funcional?

Todos los padres se encuentran en la dicotomía libertad-protección, en el caso de padres y madres con hij@s con diversidad funcional el objetivo es la protección, y esto sucede porque no tienen herramientas para visualizar a sus hij@s de otro modo.

La cultura y el papel de los profesionales deben cambiar, enriquecerse, se deben potenciar partes en las que ahora no se está poniendo el foco.

Faltan herramientas para que l@s hij@s con diversidad funcional hagan las cosas a su manera. Hacen falta recursos tecnológicos, asistentes personales, etc. El problema es que faltan herramientas, pero lo que se visualiza es que no hace cosas porque no las puede hacer, o porque su manera de hacerlas no es legítima o adecuada.

No es lo mismo “no poder hacer” que “no tener apoyo para hacer a su manera”.

¿Crees que en nuestro país aún existe un grado elevado de discriminación hacia las personas con diversidad funcional?

Hacen falta recursos, pero también una ideología, tanto a nivel de productos culturales más realistas, como en los profesionales, para orientar los recursos.

No sirve de nada que una persona disponga de una silla de ruedas si le angustia salir a la calle y que le miren mal.

Hace falta un cambio de valores alrededor de la diversidad funcional, una aceptación de la diversidad humana y un relato social más rico que permita situarse igual que el resto de personas.

¿Cuáles crees que son los ámbitos en los que más limitado se sigue viendo el acceso de personas con diversidad funcional?

En pleno siglo XXI aun se encuentran barreras en múltiples ámbitos: transporte, urbanismo, arquitectura… Estas barreras aíslan del resto de personas y de los procesos sociales.

A nivel político y social hay una gran falta de recursos al servicio de la persona. Falta cantidad y calidad de recursos, y estos deberían ser flexibles para que se puedan adaptar a cada persona.

El problema de fondo es que falta un compromiso político que haga útiles las buenas leyes que tenemos. Hace falta un cambio de mirada y valor a nivel cultural que vea a las personas con diversidad funcional como personas de derecho, con derecho a vivir y convivir, y no sólo a sobrevivir.

También es importante incorporar los ejes del placer y del deseo. Incorporar el tema de la sexualidad ayuda a romper la infantilización de las personas con diversidad funcional. Se obvia que en la dependencia hay responsabilidad política. Si se nos ve como biológicamente dependientes es normal infantilizar, ya que los naturalmente dependientes son l@ niñ@s.

La visión de las personas con diversidad funcional como seres sexuados facilita la ruptura de la visión infantilizadora. La sexualidad debe ser un motor para que las personas tengan el deseo de tener una vida propia, para desear intimidad  y libertad.

En la actualidad, se enfoca el abordaje como gestión, que es la parte más pequeña y sencilla, pero el mayor problema es que las personas no demandan vida independiente, no demandan tener vida propia. Las personas con diversidad funcional han interiorizado que su cuerpo está fuera del deseo y el placer y eso se traduce en una menor demanda de vida propia con intimidad y libertad.

También es importante la disposición de un entorno de apoyo entre iguales.

¿Qué es lo más importante que debería cambiar?

Hay dos factores que son la base de la opresión: El patriarcado y el capitalismo.

En cuanto al primero, en las sociedades patriarcales, donde la mujer vale menos que el hombre, estas están destinadas a los cuidados domésticos de las personas dependientes, y cualquier otro recurso resulta más caro. No se puede competir contra esto.
Sólo en las sociedades en las que las mujeres valen lo mismo que los hombres, funciona la vida independiente de las personas con diversidad funcional.

En cuanto al capitalismo, este piensa a la persona como ser productivo, por lo que las personas con diversidad funcional lo tienen mal. Es necesaria una alternativa a la competencia salvaje de la capacidad.

Estas son las dos patas del capacitismo, y suponen grandes peligros que debemos combatir. Y recíprocamente, combatir el capacitismo ayudará a luchar contra el patriarcado y el capitalismo.


¡Mil gracias Antonio!


Aquí os dejo algunos enlaces de interés en relación a la entrevista:

viernes, 20 de noviembre de 2015

Infancia Refugiada

Hoy, 20 de noviembre de 2015, es el Día Universal del Niño (y de la Niña), día en el que se conmemora la Convención sobre los Derechos del Niño (o como prefiero llamarla Convención sobre los Derechos de la Infancia) aprobada por la ONU en 1989 y que hoy cumple 26 años.

Los 54 artículos que recogen los Derechos de la Infancia se basan en cuatro principios fundamentales:

  • La no discriminación: los mismos derechos para tod@s l@s niñ@s.
  • El interés superior del/de la niñ@: cualquier decisión, ley o política que pueda afectar a la infancia deberá tener en cuenta que sea la mejor opción para la misma.
  • El derecho a la vida, a la supervivencia y al desarrollo.
  • La participación: el derecho de la infancia a ser consultada en aquellas situaciones que le afectan y a tener en cuenta sus opiniones.
Información extraída de UNICEF http://www.unicef.es/infancia/derechos-del-nino

Ayer, la Associació de Mestres Rosa Sensat, celebró un acto de conmemoración de esta convención sobre los Derechos de la Infancia que, en esta ocasión, puso el foco de atención en la alarmante situación de desplazamientos forzados que están viviendo niñas y niños de distintos países de África y Asia en la actualidad.

El acto contó con la presencia de Josep Mª Villena, de la TIAC (Taula per la Infància i l'Adolescència de Catalunya), que afirmó que Cataluña debe ser pionera en la atención a los derechos de la infancia así como en la acogida de refugiad@s y destacó que "la pobreza es el resultado de las diferencias económicas entre ciudadanos". 

Las ponencias del acto fueron a cargo de Joan Reventós, coordinador de ACNUR en Cataluña y Emilie Rivas, de Save de Children. Ambas fueron muy interesantes, pero también abrumadoras. Las cifras son elevadas y la situación alarmante.

El tema de los desplazamientos forzados viene preocupando a la sociedad occidental desde hace algunos meses, cuando la "crisis de los refugiad@s" empezó a llegar a Europa, pero esto no es algo nuevo. Actualmente, en el mundo hay unos 60 millones de personas refugiadas, de las cuales la mayoría son mujeres, gente mayor y niñ@s (en 2014, más del 51% eran menores de 18 años). Estas cifras se han ido multiplicando en los últimos años y la "crisis de refugiad@s" más fuerte la vienen viviendo Jordania, el Líbano e Irak.

Las principales preocupaciones en cuanto a estas niñas y niños son la protección y su acceso a la educación, teniendo en cuenta que muchas de ellas viven su situación de desplazamiento, en busca de asilo, sin acompañamiento por parte de ninguna persona adulta, es lo que se denomina MENA (Menor No Acompañado) y en 2014 había 35.000 niñ@s en dicha situación.

La situación es complicada y las vías de solución también lo son, es por ello que es de gran importancia la protección internacional y lo que podamos hacer desde los países de acogida para garantizar el bienestar de estas personas que, no olvidemos, son sujetos de derechos. Como dijo Emilie Rivas en su ponencia "si l@s niñ@s son sujetos de derechos, quiere decir que también hay obligaciones, quienes tienen esas obligaciones las deben cumplir". Este año, entre enero y setiembre, llegaron a Europa 214.000 niñ@s refugiados. Garantizar sus derechos (los mismos que los de cualquier niñ@), es indispensable.
Recordemos que tienen derecho a la vida, a la supervivencia y al desarrollo (entre muchos otros), no aportarles protección abre la puerta a "mafias" o al reclutamiento de "niños soldado", como viene sucediendo en muchas zonas en situación de conflicto.

Además, resulta básico saber como abordar este tema desde nuestra sociedad, tanto con l@s más pequeños como con la sociedad en general, dado que se debe evitar el rechazo hacia la acogida de las personas refugiadas que llegarán, se debe crear conciencia, construir opinión,

¿Cómo se puede abordar el tema desde la escuela? 

Considero básico que se abra el debate entre maestr@s y profesor@s y también entre escuelas, para que desde las mismas se converse con el alumnado, se sensibilice a las personas y se visibilice el problema. Están pasando cosas graves, que no se deben ignorar. 

Desde la biblioteca de Rosa Sensat, han preparado una maleta de libros para trabajar el tema de l@s refugiad@s, con niñ@s y jóvenes. La maleta "Guerras que no se acaban" estará disponible a partir de enero. +info: http://www.yumpu.com/en/document/view/54670080/maleta-guerres-que-no-sacaben

Además, desde el Comité Catalán de ACNUR, proponen un par de recursos educativos para trabajar el tema de l@s refugiad@s:


Invito a la lectura de los Derechos de la Infancia, documento a menudo desconocido para muchas y muchos. Much@s se sorprenderán, por ejemplo, de los artículos relativos a la "participación", pero deben quedar claros, l@s niñ@s tienen opinión, tienen derecho a ser consultados, tienen derecho a participar en la vida activa. Nuestro país ratificó estos derechos, deberíamos tenerlos claros y no olvidarlos, sino garantizarlos.

miércoles, 28 de octubre de 2015

De mujer servicial a mujer cosificada. El rol de la mujer en la publicidad.

La publicidad contribuye a la construcción de los roles de género. No es la única. Sus primas las películas y sus familiares cercanos, los cada día más estrepitosos programas de televisión también lo hacen. Lo hacen en muchas ocasiones los, hasta ahora indispensables de toda aula, libros de texto, en sus innumerables ejemplos sexistas. Son muchos los elementos sociales que contribuyen a esta construcción, que ejercen su papel socializador, en este caso socializador sexual. 

En la presente entrada nos centraremos en la publicidad y su contribución a la construcción de estos roles y, sobretodo, en observar la evolución de estos roles en el tiempo.

¿Cómo han evolucionado los roles de género en la publicidad?

Se ha pasado de una imagen de mujer servicial y "siempre a punto", perfecta ama de casa e imperfecta en el manejo de ciertos artilugios que sólo los hombres sabían usar, propia de los años cincuenta a, lejos de la ruptura de estereotipos de género, una mujer cosificada y denigrada en gran cantidad de anuncios, como si de un "objeto para el hombre" se tratase. Cuando no es así, la imagen de mujer polifacética "compañera, madre y trabajadora", prima en televisión, siempre perfecta y sin un pelo (y no de tonta).


Hoy la mujer aparece sumisa y violentada en cantidad de imágenes que bombardean nuestra mente y que evitaré mostrar, dado que no me parecen dignas de mostrar ni en el contexto de una crítica, pero no hay más que buscar un poco en la red para encontrar tan insultantes imágenes.

De una mujer que debía tener la casa bien limpia, a los niños quietecitos y a ella misma radiante y sonriente, un ser puesto al servicio del hombre en un mundo de hombres, pasamos a una mujer que es sólo un cuerpo (cada vez más artificial) para satisfacer a esos hombres que continúan siendo dueños y señores de una sociedad sumida en el patriarcado.

En contraposición a esto, supongo que como signo de supuesto progreso, nos venden una imagen de "mujer que puede (y debe poder) con todo": la casa, los niños, la pareja, el trabajo... pero no pasa lo mismo con los hombres, a ellos no se les pide estar "siempre a punto", por lo que esto se convierte en una falsa imagen de evolución y progreso del rol de la mujer, ahora simplemente, a todas sus obligaciones se le suman otras, como es el trabajo. Las exigencias crecen... y si no puedes con ellas ¿qué?

Pero las alternativas publicitarias existen, y es tan sencillo como mostrar la vida, la real, las situaciones que de veras podemos encontrar en cada parque, en cada plaza, en cada hogar... y una muestra de ello son los anuncios de Asevi Mio, una marca de frega-suelos que rompe con la imagen de familia ideal en la que todo es perfecto, con niñ@s, un papá y una mamá que, por supuesto, es la que lo mantiene todo limpio. Estos anuncios, además de romper estereotipos de género, muestran diversas realidades familiares, de las que hablaba en mi última entrada sobre diversidad familiar.

No podemos olvidar que todas las imágenes que bombardean nuestras mentes están condicionando a nuestras niñas y niños y sus concepciones sociales, el rol que deben asumir estará influenciado por toda la información que reciben. ¿Qué es lo que les queremos mostrar? ¿Cuál es la sociedad que queremos construir? ¿De que sirven todos los avances logrados si la mujer se sigue viendo atrapada en un mundo de hombres en el que su máximo potencial es su cuerpo?

¡Espero vuestras reflexiones!

miércoles, 30 de septiembre de 2015

Famílium. Diversidad Familiar

Hace unos meses cayó en mis manos, sin venir a cuento, un bonito libro-juego sobre diversidad familiar: Familium.  Sus ilustraciones me llamaron y no pude resistirme a quedármelo e indagar en él.

Es un bonito cuento que narra distintas historias de niñ@s con diversas situaciones familiares, y el juego consiste en identificar la ilustración que corresponde a cada texto.

Modelos familiares válidos que deberíamos considerar como tal, pero que a menudo se escapan a la convención social del significado de "familia".
Es muy común la imagen mental de "familia" como: un padre, una madre y un@s cuant@s hij@s. Aceptamos esto como norma, como lo valido y, hoy en día, también sus derivados (padres y madres separados, monoparentales por viudedad y, si nos descuidamos, aceptamos hasta a las madres solteras y las adopciones en parejas heterosexuales). Sin embargo, aún se discrimina en diversos ámbitos a las parejas homosexuales, con o sin hijos, y a otras construcciones familiares que no siguen un patrón común, por ejemplo, más de dos adultos con hij@s, que comparten una vida juntos o dos personas que comparten su vida sin hij@s: esto también son familias.

El material me encantó. Con él se puede trabajar la comprensión lectora, dado que tras la lectura de cada fragmento hay que identificar el mismo con una de las ilustraciones (magníficas, por cierto), y a la vez, cada fragmento cuenta una realidad familiar diferente de manera que sensibiliza y aporta consciencia sobre la existencia de la diversidad de modelos familiares.

Pero... reflexionando, me planteo si es necesario material didáctico en forma de cuento, de juego o similar, para lograr una aceptación e inclusión de la diversidad familiar, o si esa aceptación y respeto simplemente está en la medida en que los adultos vivamos dicha diversidad como natural y el niño o niña viva experiencias que le aporten riqueza en este aspecto.

En la medida en que se le permita al niño o a la niña entrar en contacto con la realidad y diversidad, no solo familiar, sino en cualquier aspecto, sus valores se verán influenciados de manera positiva y desarrollará apertura y respeto hacia la diversidad. Hacen falta más ejemplos y menos instrucciones ¿no?

domingo, 20 de septiembre de 2015

¿Hacemos plastilina?

Este verano descubrí una actividad que me  fascinó. Por su originalidad, por sus múltiples posibilidades, por sus características, por todo el proceso que implica. 
Este verano aprendí a hacer plastilina casera, una maravillosa pasta, muy suave y mucho más sensitiva que la que podemos adquirir en las tiendas.

Tocar, experimentar, sentir
¿Qué necesitamos?
Maizena (Harina de Maíz)
Crema suavizante (de la del pelo)
Colorante alimentario líquido

¿Cómo se hace?
Para un paquete entero de maizena (400gr), unos 250ml de crema suavizante, lo mezclamos bien hasta conseguir una textura homogénea, suave, que no se agriete y que tampoco sea pringosa. Si resulta demasiado dura o se agrieta deberemos echarle más crema suavizante, si por el contrario resulta pringosa necesitaremos más maizena.

En mi opinión, lo más divertido es que los niños y niñas que vayan a jugar con la plastilina participen también en su elaboración, se pringuen las manitas y puedan sentir las diferentes texturas por las que pasa la mezcla antes de convertirse en la ansiada plastilina. 

Podemos teñirla de diversos colores. Con colorante alimentario de los tres colores básicos, se pueden hacer mezclas y adquirir todo los colores que queramos. Esta también es una fase muy rica, ya que implica trabajar los colores básicos, sus mezclas y resultados, así los niños y niñas experimentan no solo con la textura (y el aroma), sino con el color y sus posibles combinaciones.

Mi recomendación a la hora de teñirla es la siguiente: Hacemos una bola con la plastelina que queremos teñir de un color concreto, en el centro de la bola, con el dedo pulgar, le hacemos un hueco y es ahí donde introducimos el color (o colores, si se trata de una mezcla). Cerramos el hueco y amasamos. Veremos que en un primer momento aparecen vetas de color, pero si seguimos amasando el color se irá homogeneizando ¡veréis que bonito!
Jugar, crear

Una vez tenemos la plastilina hecha y sus distintos colores conseguidos, es el momento de jugar con ella, moldear, crear maravillosas obras o, simplemente, tocar, oler y experimentar.
Y cuando acabemos, podemos conservarla en la nevera. En caso de que se endurezca, le podemos añadir un poquito de crema suavizante y lista para volver a experimentar y moldear.

Si queremos incrementar la parte más sensitiva del material, podemos jugar combinando los colores con los olores (esto es, usar cremas suavizantes de diversos aromas y relacionarlos con colores). Esto puede ser realmente interesante si trabajamos con personas con diversidad sensorial de cualquier tipo.

*Recomendación:
Entre fase y fase es recomendable lavarse las manos, es decir, al acabar el amasado previo al colorante, conviene quitarse los restos de harina y suavizante que se queden pegados a los dedos, para que la masa sea suave y no aparezcan grumos.
Después, al teñir los diferentes trozos, conviene lavarse entre color y color para que no se mezclen colores si no lo deseamos.

Espero que lo disfrutéis!!

jueves, 16 de julio de 2015

El uso adecuado del lenguaje contribuye a romper desigualdades

Quienes me conocen saben que tiendo a ser bastante meticulosa en cuestiones de terminología y uso del lenguaje. Quizás por las muchas palabras que mi madre me hizo buscar en el diccionario cada vez que desconocía su significado o dudaba en su escritura; quizás porque las clases de lingüística marcaron un antes y un después en mi amor por la lengua y sus palabras; quizás porque me encanta hablar (eso también lo saben quienes me conocen) y, ya que hablo, que mejor que hacerlo bien.

Por frases como la de mi Lalo "Las personas no son viejas, viejos son los trastos", que no recuerdo haber oído de su boca, pero que tanto me repitió mi madre, yo a menudo me oigo diciendo "No es sordomudo, por el "mudo", es una persona sorda, ya que hablar puede (aunque no lo haga)"  y obviamente con el "persona" delante, ya que antes que tener un déficit auditivo es una persona, no?

Detengámonos aquí un instante: 

Las personas Sordas (con S mayúscula, dado que se trata de personas con una identidad y cultura propias, sino hablaríamos de personas sordas que tienen un déficit auditivo pero no poseen identidad cultural propia) usan la lengua de signos como sistema de comunicación. Lengua (no lenguaje) y de signos (no de sordos).
Especifiquemos:
El lenguaje es la capacidad innata de los seres humanos para ordenar sus pensamientos y comunicarse; la lengua es el sistema de comunicación propio de dichos seres.
Por tanto, las lenguas de signos (no existe una única y universal) consisten en una modalidad de lenguaje viso-gestual.

Así pues, las palabras pueden contribuir a la transformación social o, por el contrario, perpetuar patrones de desigualdad. Así pasa con las personas con discapacidad, minorías culturales, diversidad de orientaciones sexuales o género.

Y con el género continúo:

¡Mujeres! Nosotras somos las que debemos empoderarnos e iniciar el cambio, para así extenderlo. No podemos ser nosotras las que contribuyamos al perpetuo lenguaje sexista, que contribuye a la desigualdad y a la invisibilización de la mujer en muchos campos.
Con esto no quiero decir que de pronto tengamos que hablarlo todo en femenino y radicalizarlo de manera que pasemos a la posición opuesta, lo cual a mi parecer continuaría siendo sexista (aunque comprensible, dado que en muchas ocasiones radicalizar es la única manera de causar impacto y remover conciencias), sino que se trata de otorgar a las palabras el género que se corresponde con la realidad de la que hablamos. Veamos un ejemplo:

Tradicionalmente múltiples profesiones se designaban únicamente en masculino, aunque a nivel oficial ya hace 20 años que se adecuó la denominación de títulos académicos oficiales a la condición masculina o femenina de quien los obtuviese, mediante una Orden de 22 de marzo de 1995 del Ministerio de Educación y Ciencia. Esto fue así dado que se consideró la importancia del lenguaje en la formación de la identidad social de las personas y en sus actitudes, así como para representar adecuadamente a la mujer y evitar discriminaciones. La RAE se mostró favorable al cambio, manteniendo las denominaciones que, debido a su terminación, se usan para ambos sexos.

Curiosamente a día de hoy se sigue oyendo a menudo, y en boca de mujeres, el uso de formas masculinas de profesiones como "juez" o "abogado" al hablar de mujeres, y a mi me sube un "no sé qué que qué sé yo" cuando lo oigo, que es como si de pronto estuviese a mediados del siglo XX.

Para acabar, y siguiendo con el género, que nadie tenga miedo de dirigirse en femenino a un grupo en el que la mayoría son mujeres, niñas o chicas ¡y que nadie se ofenda por ello! Llevo oyendo que esto es correcto desde que cursaba primaria (¡hace más de 15 años!) y bien poquita gente lo pone en práctica.

Pues bien, con ejemplos como estos no es de extrañar que haya quienes decidan hablarlo todo en femenino (¡ojo! no solo mujeres, también hay hombres que así lo hacen), a ver si así se van abriendo mentes y se van rompiendo patrones hasta ahora perpetuados pero que debieran estar obsoletos.

Las palabras estructuran nuestros pensamientos, nuestras construcciones mentales de la realidad, un lenguaje en el que no se ve representada de manera respetuosa y real toda la diversidad social, anula e invisibiliza a aquellas personas que no se ven representadas en el mismo, provocando un trato desigual hacia ellas.

¡Hablar bien es indispensable para una sociedad igualitaria e inclusiva!


Fuentes: Comisión Asesora Sobre Lenguaje del Instituto de la Mujer. Nombra (2003). Serie Lenguaje nº1.


lunes, 15 de junio de 2015

Un curso de aprendizaje constante...

Hoy me siento a hacer recuento del curso,
un curso lleno de experiencias, profesionales y personales,
de conocimiento y auto-conocimiento.

Repaso las muchas notas de charlas, conferencias y talleres a los que he asistido; sobre educación, creación, sobre sexualidad, sobre Comunidad Sorda...

Repaso un curso de constante aprendizaje, que me ha hecho plantearme y (re)plantearme incertezas, interrogantes, lo que vale y lo que no vale, porque no todo vale.

Experiencias y mucho arte, siempre con arte; de personas maravillosas que se han colado en mi vida, algunas sin previo aviso.

Conversaciones y experiencias, escuchar y abrirte, compartir.

Un curso de retos y seguridad. Seguridad embriagada de incertidumbre.

Un curso en el que comienza (o ha comenzado) mi verdadera auto-construcción.

Conocimientos y aprendizajes que van calando en una, en forma de mensajes que atraviesan, que transforman.

Muchos conceptos, teoría, conocimiento... pero remarcaré sencillamente un par de claves, dos constantes de este camino de aprendizaje, dos constantes aplicables a lo personal y a lo social, a la vida:

- Tomar conciencia de que para cuidar, atender, entender y comprender a las demás, primero hay que respirar, cuidarse una misma, conocerse y comprenderse, tomarse tiempo.

- Saber que el camino está en el presente, en lo que te vas encontrando, sin precipitar proyecciones de futuro, estar en el aquí y en el ahora, instalarse.

Respira y aprende, para disfrutar aprendiendo.

Y para cerrar, una cita:

"Sólo hay dos vías: consumir o crear, y consumir no nos permite crear" (Miguel Castro)

martes, 21 de abril de 2015

Esas cosas solo pasaban en EEUU..

Ayer, un lunes como otro cualquiera, subo al tren y empiezo a divagar, pienso en una nueva entrada para el blog, concretamente para el espacio (re)Pensar la Educación. Me vienen a la mente películas como "La Ola" y "Elephant", buen material para hablar de temas controvertidos.
Unas horas después, justo ayer... por primera vez vivimos en este país una situación de tal magnitud: Un profesor de secundaria mure en manos de un alumno de 13 años, que deja heridas a cuatro personas más.

Me encuentro hoy, como tantas personas, absolutamente consternada. 
Cuantas veces, al ver películas como las arriba mencionadas, hemos pensado "esas cosas solo pasan en EEUU, allí que las armas son tan accesibles..."
Aquí acceder a un arma puede ser complicado, no debe serlo tanto aprender a fabricarla.

Hoy en día el acceso a la información, sin filtros, pude llegar a proporcionar el material idóneo para que se den situaciones como esta. Acceso a la información sin filtros en un mundo globalizado y habitado por una sociedad que parece enfermar por momentos... 
Obviamente esta no debe ser la única causa, pero creo que está bien latente.

Ahora cabe preguntarse:
¿Qué podemos hacer al respecto? ¿Quién, cómo y de qué manera debe poner medios preventivos? ¿Cómo afrontar este tipo de situaciones desde los centros educativos? ¿Con que apoyos cuentan maestr@s y profesor@s? ¿Cómo llegan a darse situaciones como esta?
Y reflexionar... las respuestas solo pueden venir si reflexionamos profundamente y encontramos las causas reales de que sucedan hechos como el de ayer. 

Todo mi apoyo a l@s afectad@s.

domingo, 5 de abril de 2015

Educación Emocional ¿Asignatura pendiente?

Estoy desarrollando un trabajo de detección de necesidades de profesionales de la educación en materia de educación permanente. Este trabajo forma parte de mis prácticas profesionales de Pedagogía, que estoy realizando con gran ilusión en la Associació de Mestres Rosa Sensat.

Después de haber pasado un cuestionario sobre tal cuestión (la educación permanente), observo que la educación emocional es una necesidad formativa muy presente, seguida de las dificultades en el aprendizaje y la resolución de conflictos, vinculadas ambas, en cierto modo, con la educación emocional.

¿Ciertamente es la educación emocional una necesidad formativa, para los profesionales de la educación, significativamente desatendida?

Quisiera abrir el debate y que seáis vosotr@s, l@s que os encontráis con esta carencia, quienes opinéis sobre la necesidad de una mayor oferta formativa sobre esta materia y en que aspectos os parece más relevante.

"La mejor manera de conocer una realidad es escuchando a quienes forman parte de ella"

¡Animaos a compartir!

(Junto con tu comentario indica en que etapa desarrollas tu práctica y la zona en la que se ubica, gracias ;)

viernes, 20 de marzo de 2015

Entroncando el conocimiento...

Los saberes no son elementos aislados...
como si de raíces se tratase, todos ellos entroncan en el mismo árbol
para después ramificarse de nuevo, generando nuevas construcciones
nuevos significados que de nuevo no están aislados, sino conectados.


Si bien esto es cierto, segmentar el conocimiento en materias sería como destruir ese árbol, 
como crear construcciones anti-natura, que desencadenan en conocimientos sin sentido...
... desconectados.

sábado, 7 de febrero de 2015

Cuando conocí "el cuento" (y se quedó a mi lado)

Entre lucha y aprendizajes, buscándome a mí misma y buscando mi lugar, encontré un compañero de viaje, y tal hecho supuso mi encuentro con un tipo de texto con el que me sentía fuertemente identificada, que me permitía expresarme desde un espacio muy propio, que me resultaba excitante y prometedor; me encontraba en el mundo de los cuentos. El cuento con intención concienciadora, con intención educativa, el cuento para niños ¡y para no tan niños! Los cuentos me hicieron volar, suponían magníficos viajes creativos, a la vez que constituían una herramienta de tipo didáctico que daba respuesta a mis motivaciones profesionales.

Todo empezó por un cuento de “buenas noches”, por una historia improvisada, y supuso el inicio de lo que hoy es uno de mis mayores propósitos, personal y profesionalmente. Lo que nació como una llamada al sueño, vivió durante días sobre una servilleta de papel y maduró en un proceso de reflexión ecológica, hoy es mi primer cuento acabado y el que pronto, espero, saldrá a la luz; y es que él es eso, algo gris que irá cogiendo color; es que yo soy eso, alguien ínfimo en la inmensidad, que busca el brillo de quién sabe qué lugar.

sábado, 31 de enero de 2015

Materiales (sin)sentido

En el apartado "Programando sin sentido" podéis encontrar un nuevo material para trabajar con personas con sordoceguera, o simplemente con discapacidad visual.

¡Espero que os guste!